Me ha encantado ir de compras convulsivas con una amiga, eso
de levantarte diciendo............hoy me tengo que comprar algo para mi, y tal
como lo piensas, a la menor oportunidad lo propones, chica vámonos de compras,
- ¿sin dinero?-, sin dinero, para que existen los “chinos”?........Para hacer
felices a todas las que andamos en números rojos.
Experiencia religiosa ¡¡¡¡¡ entras en ese mega chino, te
sientes poderosa, importante, solo llevas cinco euros como capital, pero, eso
tiene importancia? Lo importante es que vas a satisfacer la necesidad de
hacerte un regalo por mínimo que sea, sabes que te lo mereces, y sobre todo la compañía
hace mucho, no tiene el mismo efecto ir al chino sola que con otra mega reina
como tu.
Eso si, dado la escasez de capital, hay que mirarlo todo,
todo y todo, rebuscar, ojear, manosear, elegir con acierto el destino de esos
euros, que si un sujetador, que si unas braguillas, perfumes, santitos, pintalabios,
flores, velas................ sin saber realmente que quieres comprarte, pero
teniendo muy claro que es allí donde tienes que fundirte los cinco euros,
mientras vamos de calle en calle el chino de la tienda se vuelve loco persiguiéndonos,
es curioso, obsérvalos, van detrás tuya todo el rato, pero no los escuchas
llegar, son pequeñitos, sigilosos, siempre con esa mirada de sospecha, en el
fondo son encantadores, cuando le preguntas algo terminan sonriéndote sin saber
a que te referías.
Un ratito divertido no nos viene mal a nadie, al final he invertido
en color para mis mejillas y perfume de ese que vuelve loca a las moscas, mi
mega amiga ha preferido invertir en sus pies, no seáis mal pensados, no se ha
comprado nada para el olor, simplemente unas plantillas.
Luego de la fantástica compra, como dos mujeres realizadas
nos hemos metido en el coche, hemos hablado un ratito del monotema “hombres”,
mientras aspirábamos el humo de nuestros cigarrillos, entre risas y bromas
arranque el coche, sin recordar siquiera lo que había comprado, pequeñas cosas
se hacen grande cuando las haces con personas que merecen la pena.
“Algún día volaras con esas hermosas alas que tienes, solo
tienes que mirártelas y ver que son únicas y tuyas.”
Charo
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