Romper lazos, abrir cadenas, desatar nudos, le llamemos como
queramos llamarlo, es algo que a la mayoría nos cuesta mucho esfuerzo y a veces
mucho dolor, pero es un ejercicio al que nos obliga la misma vida, no podemos
vivir atados a cosas y personas que ya son de un tiempo pasado.
Cuando nos toca hacerlo aparece el miedo, el ser humano
tiene temor a lo nuevo y se agarra con uñas y dientes a lo conocido aunque eso
mismo le este haciendo daño.
Hay que armarse de mucho valor, cambiar nuestra mente estática,
abrir nuevos horizontes, ver con otros ojos para mirar hacia delante sin temor
de perder lo que dejamos atrás, porque realmente no es una perdida sino un
avance irremediable para no quedarnos estancados.
El miedo nos lo produce el desconocimiento, si buscamos el
conocimiento, el miedo no podrá hacer nada en nuestra contra, no preguntemos a
los demás ¿por qué?, los otros no tienen la respuesta, ella esta dentro de ti,
y solo tu puedes responderte, pero cuando te respondas se sincero, no te mientas,
tu ego puede hacer estragos si le permites que tome el mando en tu vida.
Nuestro ego es el que nos dice que los demás son culpables
de nuestros problemas, el que nos hace creer que otros tienen que hacernos
felices, el que hace que esperemos que lo bueno y lo malo nos lo envíen, nada
más erróneo, la felicidad existe dentro de ti, en todo caso podrías compartirla
con los demás, pero nunca esperar que nadie te la de, lo bueno y lo malo que
nos pase no viene provocado más que por nosotros mismos y de nada vale culpar
al resto.
Somos “mente”, el corazón es simplemente un órgano más de
nuestro cuerpo, “no siente”, todo se produce en nuestra mente, las imágenes,
sensaciones, sentimientos, todo lo que somos comienza en la mente, y más básicamente
en las pequeñas “corrientes de energía” que en ella se producen. Hoy en día podríamos
decir que “el poder esta en la mente”, exactamente igual que lo aseguraban hace
miles de años nuestros antepasados.
Si trabajamos nuestra mente podríamos llegar a dejar de
sentir incluso el dolor físico y espiritual, puedo aseguraros que nunca es
tarde para empezar y la recompensa es infinita.
Os dejo un enlace por si alguien esta dispuesto a avanzar
sin miedo.
Charo
Buen tema y buen post Charo.
ResponderEliminarPor desgracia conocer y dominar nuestra mente, es algo que ni imparten en las escuelas ni nos enseñan desde pequeño en nuestras familias.
Así vamos como vamos...
En fin, que una cuestión como el Ego daría para llenar páginas y páginas.
Pero me moló tu síntesis.
Aunque somos tanto él, tanto el otro, tanto el ego, que hay quién se destruye el día que aprende a identificarlo...
Todo un cambio.
Bueno, corto ya, que me enrollo más que la blogera :P
Como en otras ocasiones, ha sido un gusto leerte.
Cierto Miguel, dominar la mente es un ejercicio duro y dificil, pero si hemos llegado hasta aqui sera para algo, por ejemplo para intentarlo???
ResponderEliminarYo como siempre inconformista e idealista, sino fuera así no entenderia la vida.
Gracias por tus comentarios siempre interesantes.