
Lo peor de todo esto, o lo mejor, según se mire, es que me
propuse hace ya unos meses vivir como si fuera el ultimo día, es decir,
apuntarme a un bombardeo, reír hasta explotar, no guardarme nada de lo que
pienso, aunque algún@ se escandalice de la poca vergüenza que puedo tener,
ponerme los tacones más altos, mirar con ojos de niña todo lo que mis ojos
alcanzar a ver, pintar mis labios de rojo pasión, dejar que mi corazón sienta
sin ponerle barreras...........en resumidas cuentas, no quiero que pase el “fatídico
día”, o me tendré que buscar otra excusa para seguir viviendo de esta manera
tan feliz que he descubierto.
Mis felicitaciones a esos Mayas que se estrujaron la mollera
para hacer el calendario, no saben ellos que después de tantos años hicieron
maravillosamente feliz a una mujer del siglo XXI.
Charo
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