A veces es difícil seguir, pareciera que los pies se volvieron
de plomo y la luz tenue y amarillenta, son esos momentos en los que
nos parece más fácil tirar la toalla y mandarlo todo al cuerno. Pero, aunque
sintamos que no hay ganas ni fuerzas, es solo un engaño de nuestro ego para
devolvernos donde muchos de nosotros ya
estuvimos, y que por nada del mundo queremos volver.
Cada uno, puede crear su truco para engañar al maldito ego,
darle esquinazo y seguir adelante, el mío consiste en parar, cerrar los ojos y
traer a mi memoria todos los momentos bonitos y placenteros, en ese trance,
atisba a mis labios la sonrisa, entonces me pregunto…….y vas a perder el
precioso tiempo en sentirte mal?
Para mi es una metodología estupenda, solo me costó cambiar el
pensamiento negativo que rondaba mi cabeza, en positivo, y se obro el milagro,
a partir de ahí solo queda mantenerme en él, reír mucho, abrir los ojos y el
corazón a la vida, el resto viene de camino.
Besos a tod@s.
Charo
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